Redacción Tu CASA Magazine
Más de cien artistas de la música y la actuación desfilaron este jueves por la alfombra magenta de la edición 2020 del Premio Lo Nuestro, en la que abundaron atuendos de colores blanco, crema, aqua y negro, telas ligeras bordadas y una cantidad similar de aciertos y desaciertos.
Entre los mejores vestidos de la velada se destacaron los conductores de “Noche de estrellas”, la transmisión desde la alfombra situada a la entrada del American Airlines Arena de Miami (EE.UU.), en donde se entregan los galardones.
La venezolana Chiquinquirá Delgado y el chileno Rafael Araneda eligieron trajes de gala y, en el caso de ella, de silueta escultural. También estaban hermosas las maestras de ceremonia, Alejandra Espinoza y Thalía, que envolvieron sus figuras envidiables en vestidos drapeados de color azul agua de diferentes intensidades y muchos brillos.
Traje blanco
Del mismo color, aunque no con el mismo efecto, era la camisa elegida por Ricky Martin, quien la llevaba abierta y acompañada de un traje blanco y zapatos marrones descombinados, que lo sacaron de la lista de los mejores vestidos en la que suele estar. El astro puertorriqueño fue uno de los primeros en aparecer, pues debía prepararse para el debut en vivo de su nueva canción, “Tiburones”, con la que abriría el espectáculo de tres horas.
Con un traje similar, quizás inspirado en la anunciada presencia de John Travolta en los premios, desfiló Ricky Montaner, mientras que su hermano Mau iba de un negro monocromático. Fue obligado el recuerdo al icónico traje blanco y camisa negra del actor estadounidense en “Saturday Night Fever”, la película que le dio fama internacional.
La actriz y cantante mexicana Sandra Echeverría, de blanco, y la artista urbana Cazzu, de negro, fueron las que destacaron con vestidos largos y transparentes, que dejaban ver lo que parecía ser su ropa interior.
Trajes monocromáticos
Con el mismo estilo, pero con muchísimos más toques metálicos, se vistió Gloria Trevi, quien se prevé que forme parte del homenaje a Raphael. El legendario artista español, homenajeado con el Premio Lo Nuestro a la Excelencia Musical en esta edición de los galardones, llegó acompañado de su compatriota David Bisbal. Ambos también de blanco y negro.
Los integrantes de CNCO aparecieron con trajes también monocromáticos, pero de estilo mediogaláctico, y los del Grupo Bronco iban en los mismos colores, pero con apariencia de “smoking” con bordados de caballos. El joven y galardonado artista regional mexicano Christian Nodal se veía elegantísimo con un sombrero norteño de ala negro y un traje del mismo tono de chaqueta cruzada.
También lucieron sus mejores galas el actor mexicano Jaime Camil y el turco Çağatay Ulusoy, famoso por su papel de Emir en la telenovela “Amor eterno”. De negro desfiló, además, el reguetonero colombiano Manuel Turizo, quien le dio un toque moderno al llevar una camisa transparente.
No acertaron
Entre los peores vestidos estuvieron la artista urbana Natti Natasha, que llevó un vestido de cuero negro que no le hacía justicia a su figura. También desilusionó la presentadora mexicana Galilea Montijo, cuyo vestido negro intentó combinar el tul semitransparente con un corte de princesa.
Mientras los famosos derrochaban su estilo, el público que se había reunido alrededor de la arena, situada frente a la famosa bahía de Vizcaya, pudo disfrutar de un espectáculo musical amenizado por la reguetonera miamense Mariah, quien cantó sus canciones “Perreito” y “Taxi”.
Yennis Bencosme interpretó “De mi cama pa tu cama”. La banda colombiana Morat tocó su tema “Cómo te atreves”, mientras Mau y Ricky cantaron un popurrí de sus éxitos de los últimos meses, comenzando con su balada “Si te pido”.
Nuevo trofeo
También durante la alfombra se presentó un nuevo diseño del trofeo de Premio Lo Nuestro, que ahora es una versión estilizada de la clave de sol, uno de los símbolos musicales más reconocidos y más usado en las partituras. Bisbal fue el encargado de cerrar el pre-show con su canción “En tus planes”, que también da el nombre del disco que presentó en enero. Al concluir la alfombra, había comenzado a caer una leve lluvia en la ciudad de Miami y el público se dispersó rápidamente.